La gran mayoría del tiempo pasa desapercibido y lo damos por sentado, pero las redes eléctricas en nuestro hogar u oficina son elementos fundamentales para el desarrollo de la gran mayoría de nuestras actividades diarias. Que cuenten con un correcto funcionamiento podría ahorrarnos preocupaciones y gastos futuros.
Una excelente instalación eléctrica, como las que hacen los amigos de Minielectric en Toronto, puede ser un punto de inflexión en el tiempo de vida de nuestros aparatos: tanto domésticos como de oficina.
El mal empleo de la energía podría causar desde fallas en el sistema, hasta daños en aparatos que en muchas ocasiones pueden costar miles de dólares en reparación o renovación.
Asimismo, una red eléctrica saludable permite que las personas cuenten con una recibo de luz más sincero y menos costoso a final de cada mes, pues el desperdicio de energía y la fuga de esta derivan en grande aumentos en su factura.
Incluso una red eléctrica mal instalada se traduce en exposición al peligro para las personas, no solo al nivel de heridas o tragedias por electrocutarse, sino que cables mal colocados, enredados, o pelados, pueden ocasionar conatos de incendio que finalmente pueden salirse de control y causar pérdidas irreparables.