(Foto: tomros88)
Las primeras nevadas ya están golpeando diversas regiones del país y, con cada día que pasa, el frío se hace aún más protagonista. Pronto la calidez solo será producto de la calefacción y la nieve tomará su lugar como amo y señor del paisaje nacional.
Muchos inmigrantes recién llegados a Canadá no han vivido el invierno canadiense y algunos, de países más cálidos, ni siquiera han visto, sentido o convivido con alguna nevada, por lo que esta experiencia es tanto fascinante como nueva por lo que su percepción de cómo atravesar esta época está un poco velada.
El invierno en Canadá no es algo para tomar a la ligera. A los suaves días del comienzo de la estación le siguen las temporadas en que el frío recrudece y todo debe acomodarse al invierno o el invierno las acomoda por si mismo, por eso es importante seguir algunos consejos para disfrutar del invierno y no padecerlo.
La ropa es lo primero y principal
Es prioritario, para cualquier inexperto en la materia, poder conseguir ropa muy abrigada; una chaqueta, gorros y guantes de invierno son el paquete básico, pero también hay que incluir los calentadores para debajo de la ropa o las bufandas que tanta polivalencia aportan a nuestras necesidades.
Para inicios del invierno, la necesidad de ropa sumamente abrigada puede no parecer imperantes. Los meses de noviembre y diciembre suelen ser los más amigables, pero si dejas que llegue los fines de enero y mediados de febrero sin prepararte puede que sufras y no disfrutes del invierno en Canadá.