Muchas personas que quieren comprar casa en Canadá no saben o no comprenden la diferencia entre “joint tenants” (que si uno muere automáticamente su parte le pasa al otro) y “tenants in common” (si uno muere, su parte puede ser heredada por quien la persona que murió dispuso en su testamento, o por su más próximo heredero) es decir el titulo no pasa automáticamente al copropietario.
Cuando una persona o familia quiere adquirir una vivienda y no tiene el dinero suficiente, necesita que otra persona ponga el restante, por ende esta va en el título de propiedad. Si no lo registran correctamente, o peor aún si no comprenden las implicaciones, pueden haber muchos problemas.
En este caso el pariente tiene un porcentaje de la casa dependiendo de cómo esté registrado (50%, 1% u otro). No se puede vender la casa sin acuerdo de esta persona y vale tener un acuerdo de antemano definiendo los derechos de cada uno. El otro pariente va a tener que pagar capital gains tax – impuesto sobre el aumento de valor de su proporción de la propiedad, a menos que vive en la casa.
Otro escenario puede ser que el padre que trabaja esté en el titulo pero no su esposa porque ella no labora o no califica para la hipoteca, por lo que le piden a su hijo, el cual está casado, que ayude con el dinero que hace falta para completar la base financiera para poder solventar la hipoteca. Así, padre e hijo son propietarios pero no sus esposas, si el hijo y su esposa residen en la misma casa y la esposa del hijo se quiere separar ella puede pedir sus derechos/su parte de la residencia matrimonial. Si los padres quieren vender la casa y la esposa del hijo no quiere que se venda, ella puede negar su firma y sin esta la casa no se puede vender.
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También, muchos padres deciden, por cualquier motivo, poner su casa a nombre de su hijo, aunque estos estén pagando por la hipoteca de la casa, pero si el hijo es el propietario registrado en el título y no sus padres, él puede vender la casa y echar a sus padres de ella, es decir, podrían quedarse en la calle.