Llegar como inmigrante a Canadá no es un proceso sencillo. No solo se trata de adaptarte a una nueva realidad, sino la melancolía de recordar tu hogar. Sin embargo, una cosa es planear salir de tu país en búsqueda de nuevas oportunidades y otra, muy diferente, es tener que irte por problemas políticos y sociales.
Eso es lo que sucede con muchos refugiados que llegan al país. Muchos de ellos tienen que dejar su hogar por seguridad y adaptarse a un nuevo entorno. Esa es la historia de Byron Paz, refugiado guatemalteco que llegó a Canadá en febrero del 2000 con muchos sueños de estudiar y superarse.
Superando problemas con cambios de perspectiva
Cuando Byron llego al país lo primero que quería hacer era culminar sus estudios, ya que sabía que con estos podría optar a mejores puestos laborales. “Mi idea era terminar con mi bachiller, pero me devolvieron a highschool. Luego postulé a tres universidades y sí me aceptaron, pero el problema fue mi estatus migratorio”.
Por su estatus de refugiado Byron no era considerado ni como residente ni ciudadano, por lo que las universidades en Canadá le permitirían ingresar, pero como estudiante internacional, algo que, en aquel momento, Byron no se podía permitir.
Él sabía que tenía que cambiar su futuro, pero para hacerlo primero debía modificar su perspectiva y, tal vez, sus sueños. Decidió que buscaría opciones en otras profesiones y fue así como se dio cuenta de que a las personas en ventas les iba muy bien.
En aquel momento Byron contaba con una experiencia mínima en ventas. Nos comenta que “en Guatemala yo vendía ropa, pero muy poco” y aún así un día decidió enviar una aplicación a la empresa American Income Life (AIL), la cual le enseñaría todo lo que debía hacer en el rubro y que le permitió cimentar su camino al éxito.
Inicios en el desarrollo empresarial
A pesar de tener nociones de ventas básicas, trabajar con una empresa como AIL podría intimidar a cualquiera. Recordemos que AIL está bajo el liderazgo de Globe Life, la novena compañía más grande del mundo y la que tiene más clientes de seguros en todo el mundo.
Sin embargo, Byron había decidido hacer cambios en su vida y eso implicaba arriesgarse. Fue así como envió su aplicación y poco después lo contactaron. Poco a poco se dio cuenta de que AIL tenía algo peculiar y es que no buscaba necesariamente personas expertas en ventas, sino gente comprometida.
Después de algunas entrevistas Byron fue contratado por el dueño del negocio, pero la historia no acaba allí. Gracias al apoyo, asesorías y constante capacitación Byron logró su primer ascenso convirtiéndose en agente supervisor en tan solo 6 meses. A esta promoción le siguieron:
- Mayo 2004: se convierte en líder de agencia (segundo ascenso)
- Agosto 2005: promovido a Master General Agent (MGA) (tercer ascenso)
- Agosto 2006: ascendido a Agente General Regional y constantemente se ubicó entre los 20 mejores RGA/MGA en todo el mundo con AIL
Pero su más importante logro llegó en diciembre del 2013, cuando, después de 8 años de convertirse en MGA, Byron recibió su ascenso a Agente General del Estado y se convirtió en propietario de una agencia bajo una sociedad que vio el nacimiento de BP Agencies.