La incertidumbre ha tomado posesión de nuestro futuro a causa de la pandemia de coronavirus en Canadá. Aunque afortunadamente miles han logrado superar la enfermedad, otros tantos han sucumbido ante esta, dejando además de dolor, una serie de preguntas entre sus familiares pues estos no llegaron a elaborar un testamento en el cual se definía su última voluntad.
En ese sentido, y también como parte de los protocolos de salubridad, las autoridades legislativas de Ontario han establecido procedimientos para poder llevar a cabo la elaboración y legalización de un testamento virtual. Una firma de abogados y notarios con atención en todo Ontario puede acompañarle y asesorarle en este proceso de modo que se lleve a cabo correctamente.
La firma Malicki Sánchez nos da mayores luces con respecto a esta nueva modalidad: “Después de que se proclamaran las órdenes de emergencia en Ontario, el Procurador General Doug Downey anunció cambios en la Ley de Testamentos y otros estatutos para garantizar que los tribunales reconozcan los testamentos firmados virtualmente”.
“Los testigos deben poder ver firmar al testador. Los testigos luego firman y el testador debe verlos firmar. Ambos firman documentos idénticos que luego se combinarán para hacer un testamento. Uno de los testigos debe ser licenciatario de la Law Society of Ontario, es decir, un abogado o un paralegal”, complementan.
De resto, en cuanto a los deberes de cada uno, no hay mayores variantes. El abogado se preocupa por los mismos problemas que cuando el testamento es firmado a la antigua por todas las personas presentes en el mismo lugar. Debe asegurarse de que el testador entienda lo que está firmando. Él o ella tienen que asegurarse que los deseos del testador se expresen claramente y que de hecho sean los deseos del testador.