Un contrato matrimonial es un acuerdo entre dos personas que se firma antes del matrimonio (conocido como acuerdo prenupcial o “prenup”) o después del matrimonio (posnupcial). Este documento define los derechos y obligaciones de las partes en caso de que la relación se disuelva.
Existen diversos temas que pueden abordarse mediante un contrato matrimonial, especialmente aquellos relacionados con la división de bienes, el apoyo conyugal y la manutención de los hijos, así como los arreglos parentales y la autoridad para tomar decisiones sobre ellos.
Aunque la legislación establece reglas generales para resolver estas cuestiones, las diferencias en interpretación pueden generar disputas costosas y prolongadas. Un contrato matrimonial permite anticipar cómo se manejarán estos asuntos, ayudando a evitar conflictos futuros, brindar certeza financiera y reducir el estrés emocional que acompaña una separación.
¿Qué temas pueden incluirse en un contrato matrimonial?
- Cuestiones financieras y de propiedad, como la titularidad y división de bienes: El matrimonio se considera una sociedad económica. Según la ley, los bienes adquiridos durante el matrimonio se dividen en partes iguales al momento de la separación, a menos que las partes acuerden lo contrario. Un contrato matrimonial ofrece la posibilidad de modificar estas disposiciones predeterminadas, excluir ciertos bienes del cálculo de división y definir cómo serán tratados en caso de ruptura. También puede incluir métodos de valoración de activos, responsabilidades de deudas, administración de bienes y derechos hereditarios.
- Apoyo conyugal: El contrato puede establecer los términos del apoyo económico de una parte hacia la otra, definiendo montos y duración. Incluso, las partes pueden renunciar al apoyo conyugal, garantizando independencia financiera al momento de la separación. Sin embargo, estas cláusulas solo son válidas si resultan justas y razonables al momento de la firma y no causan dificultades excesivas al disolverse el matrimonio.
- Educación y formación moral de los hijos: Las partes pueden incluir disposiciones relacionadas con la educación y formación moral de los hijos.
- Manutención de los hijos: Pueden incorporarse acuerdos sobre las obligaciones de manutención infantil; sin embargo, el tribunal puede anularlos si los considera injustos o contrarios al interés superior del menor. La manutención infantil no puede eliminarse totalmente, ya que es un derecho del niño.