Normalmente después de tres meses de atraso las compañías financieras regularmente trasladarán su deuda a una agencia de cobranza. A menudo, estas empresas venderán su deuda a una agencia de cobranza por centavos de dólar. Otras veces, la empresa original simplemente contratará a una agencia de cobranza para cobrar en su nombre. Los cobradores de deudas tienen una misión y una única misión: cobrar la deuda pendiente.
A continuación, le mostramos cómo negociar con los cobradores de deudas cuando llamen.
Lo primero es lo primero
Cuando tenemos inestabilidad financiera y se pregunta cómo llegar a la siguiente fecha de pago, lo último que necesita es ser intimidado por los cobradores de deudas. Por lo tanto, si no puede pagar sus deudas, no se sienta presionado a renunciar al poco dinero que tiene para cuidar de su familia. No permita que lo estresen para que pague algo que realmente no puede pagar.
En cambio, establezca sus prioridades financieras claras
- Comida (en la mesa y en la nevera)
- Servicios públicos (comunicaciones, mantener las luces encendidas y el agua corriendo)
- Techo (asegúrese de estar al día con la hipoteca o el alquiler)
- Transporte (para que pueda ir y venir del trabajo)
Sepa que se puede negociar (y llegar a un acuerdo).
Si después de atender sus necesidades básicas le queda algo de dinero, una buena opción podría ser presentar una Propuesta al Acreedor. En la mayoría de los casos se puede renegociar sus deudas a un tercio del total de la deuda (cada caso es diferente), pagando cero intereses y extender el plazo de pago hasta 60 meses. De esta manera realizará un único pago mensual. Para presentar una Propuesta al Acreedor, necesita comunicarse con un Licensed Insolvency Trustee para evaluar sus opciones.
Si sus deudas son pocas y hace tiempo que no las ha pagado, puede intentar negociarlas directamente con la agencia de cobranza.