En medio del proceso para comprar un seguro de vida en Toronto que se acomode a tus necesidades y a la de tu familia, seguramente leíste que hay algunos seguros de vida sin exámenes médicos y otros que son tradicionales.
De aquí surge la duda de en qué se diferencian y cuál podría ser mejor. Pues en esta nota conoceremos un poco más sobre los seguros de vida sin exámenes médicos y algunos mitos que hay a su alrededor. Así podrás elegir el que más te convenga.
¿Qué es un seguro de vida sin exámenes médicos?
En pocas palabras, un seguro de vida sin exámenes médicos significa una solicitud de seguro para la cual no tienes que hacer ningún examen médico. Es decir, no hay necesidad de análisis de sangre, de orina, signos vitales o ECG.
Sin embargo, toma en cuenta que, dependiendo de la aseguradora con la que trabajes, podrías necesitar alguno que otro examen médico. Justamente eso es lo que intentaremos entender desmintiendo algunos de los mitos más conocidos en torno al seguro de vida sin exámenes médicos.
MITO 1: Un seguro de vida sin exámenes médicos significa que no se solicita información médica
Si bien es cierto que no se te pedirán exámenes médicos para evaluar tu solicitud y brindarte el seguro, si habrá algunas preguntas médicas. De hecho, esa es la única forma en que la aseguradora puede evaluar con precisión el riesgo al suscribir y solicitar un seguro.
Aunque las preguntas médicas se formulan de manera muy diferente a la de una solicitud simplificada en comparación con una solicitud tradicional, aún habría preguntas médicas que deben responderse para poder calificar para la cobertura.
MITO 2: Un seguro de vida sin exámenes médicos no me cubre tanto como uno regular
Un seguro de vida cubre la muerte de la persona asegurada. Si alguien tiene una cobertura de $500,000, ya sea una póliza simplificada (sin exámenes médicos) o una póliza tradicional (suscrita), el tipo real de cobertura no cambia. No hay exclusiones adicionales, ni términos y condiciones adicionales en comparación con una póliza tradicional.