Dicen que quienes visitan Stratford lo hacen por sus chocolates y se quedan por sus obras; o que la pasión por la cocina aquí es igual o más grande que el amor por el teatro. Y es que Stratford, con los años, se ha convertido en una meca culinaria y, por lo mismo, en un destino ideal para sibaritas.
Junto con contar con una de las escuelas de chefs más prestigiosas de Canadá, Stratford- y el condado de Perth- es uno de los lugares más privilegiados para el cultivo en América del Norte. Lo mejor de su terroir lo puedes descubrir visitando sus granjas, participando en sus festivales gastronómicos, tomando un tour culinario o cenando en uno de sus elegantes restaurantes, seguido de una romántica caminata por los jardines que rodean al pintoresco río Avon.
Toures culinarios
Nuestra experiencia culinaria en esta ciudad de edificios históricos y estilo inglés comenzó con un tour por sus cafeterías, tiendas y boutiques, donde conocimos a verdaderos artesanos de la cocina y degustamos sus deliciosas creaciones elaboradas con los mejores ingredientes locales e internacionales. Se trata del tour “Flavors of Stratford” (flavorsofstratford.com) un recorrido guiado de dos horas a través del cual conocerás y probarás los diferentes sabores que esta localidad ofrece ($42 por persona).
Como buenos canadienses, partimos el recorrido con un expreso en Revel Caffe (50 Wellington Street), un bar-cafetería como las de Italia donde se sirven deliciosos cafés preparados con granos de calidad provenientes de la Finca La Unión en Nicaragua, donde el café se siembra en altura y se cultiva y procesa con un incomparable nivel de precisión y cuidado. “Nuestra pasión es crear un buen café que ayude tanto a las comunidades locales y globales”, nos explica su dueña y barista, Anne Campion.
Es tanta la pasión de Anne por el café que a comienzos de año viajó a Nicaragua para ver in situ cómo se producen sus granos de café y participar en la cosecha 2012. Gracias a su obstinado trabajo, Revel Caffe se ha convertido en uno de los lugares predilectos de los locales para disfrutar de un buen capuchino, un latte, un expreso, un americano o un moca, acompañado de un dulce casero como un irresistible macaron de coco.
Seguimos nuestro circuito en Kitchen Connaisseur ( 75 Ontario St.), una parada imperdible para los amantes de la cocina gourmet. Se trata de una tienda con una enorme variedad de salsas saladas y dulces (se pueden degustar) aceites, vinagres, pastas, hors d'oeuvre y hierbas para cocinar. “Nuestra línea de productos fue creada con un solo objetivo: reducir el tiempo de preparación de las personas ocupadas, pero asegurando al mismo tiempo un plato terminado con calidad. Estos productos pueden utilizarse tanto en una cena familiar como en un menú más elaborado, para esas ocasiones especiales”, explica su creadora Sheena McLeod, quien es además dietista de la University of Western Ontario.
Tras curiosear en su tienda, degustamos dos de sus productos más populares: un chutney de granada – un condimento del medio oriente- y una salsa de curry, crema y coco, premiada en el Canadien Food Show. Servidas con quesos de Montforte Dairy, quedan perfectos como appetizers, o como sazón para ensaladas, pollos, arroz, paté y terrinas. Para más ideas, puedes visitar su sitio web, donde Sheena publica variadas y novedosas recetas para cada temporada.
Seguimos con una parada dulce en Chocolate Barr’s Candies (136 Ontario) donde Derek Barr vende los más exquisitos dulces y chocolates con cocoa de México, Perú, Venezuela, Costa Rica y Madagascar, entre otros países. Si eres amantes de los chocolates, aquí te volverás loco ya que hay más de cien variedades para elegir. Aunque el producto estrella son sus trufas, elaboradas con los ingredientes más exóticos: vino de hielo, crema irlandesa, vinagre balsámico, lavanda, canela picante, whisky o sal marina, entre otros. “Para San Patricio, nos hicimos famosos con nuestra trufa Guiness. Me gusta que la gente venga a la tienda y se entretenga: aquí hay chocolates para todos los gustos”, nos cuenta Barr, quien, además, realiza talleres de cocina para los que deseen aprender a preparar sus propios chocolates.
Stratford es famoso por sus quesos y para degustarlos, nos dirigimos a Milky Whey Fine Cheeses (118 Ontario Street), donde Liz Payne, Maître D'Fromage, ofrece una selección de setenta quesos locales e internacionales y productos para acompañar - como crackers, chutneys y charcutería- además de preciosas tablas para quesos de bambú y otros accesorios. Aquí degustamos un trozo de Mouton Rouge de Best Baa, un queso de leche cruda de oveja de aroma fresco y levemente cremoso. Especial para servirlo acompañado de frutas o mermeladas y un vino tinto suave.
Liz es una verdadera enciclopedia en torno al queso: le gusta aconsejar con qué combinarlos, qué galletas utilizar, con qué vinos degustarlos y cómo cortarlos correctamente. “Para elegir el vino, hay que tener claro que lo que se está degustando en el queso y no viceversa”, explica. Es capaz de decir hasta qué quesos son mejores según tu tolerancia. En su tienda, también realiza degustaciones de quesos con cervezas, que finalizan con una exquisita fondue.
Después de haber aprendido un poco más sobre quesos, nos acercamos a un hermoso inmueble de ladrillo, muy inglés, donde se encuentra Distinctly Tea (18 York Street), una boutique con una selección de 350 tés de calidad internacional, además de una colección de infusores, filtros, teteras de porcelana, tazas y cerámicas pintadas a mano. Su dueña, Diane Krampien, es una experta en té y le gusta aconsejar a sus clientes sobre cuáles tomar para relajarse, para combatir el stress, para dormir bien en la noche, para adelgazar, o para cualquier otro fin.
En la tienda de Krampien hay tés de todos los tipos ( rojos, verdes, negros, blancos) infusiones y hierbas. En la ocasión, probamos el té Lapacho, el cual, con la yerba mate, cada vez está siendo más popular en esta zona. Referido como el “Té de los Incas”, procede de la corteza del árbol lapacho que crece en Sudamérica. Se le atribuyen una serie de beneficios, como su capacidad para mejorar la calidad del sistema inmunológico y eliminar las gripes e infecciones en general.
Nuestra úlima parada fue en The County Food Co. (38 Erie Street), donde, como su nombre lo indica, se sirven entradas, ensaladas (cuenta con un salad bar) platos de fondos, pies y postres frescos preparados con ingredientes locales para una masticada rápida o para llevar. Durante el verano, su chef Janet Ashworth también ofrece simpáticas loncheras con productos para un picnic ( $26 para dos personas) a los que adjunta un mapa dibujado a mano con los mejores lugares para disfrutarlos.
Aquí finalmente pudimos sentarnos y disfrutar de la companía y del humor de Janet mientras probamos sus exquisitos bocados de masa de queso cheddar y cebollín unidos con jamón y jalea de pimentón rojo, junto a un trozo de su Alsatian pizza preparada con queso asiago y cebolla caramelizada. Acompañada de un refrescante Riesling de la zona, fue el delicioso y reconfortante final de nuestro tour.
El sendero del chocolate
Otra manera entretenida de conocer Stratford – en especial para los que se desviven por los dulces- es seguir el Chocolate Trail, un sendero con diferentes paradas ( muy cerca una de la otra) donde puedes probar los más deliciosos chocolates en diferentes formatos (puro, como salsa, como aderezo a un rico trago, etc.) o llevarte una muestra para más tarde.
Stratford cuenta con renombrados pasteleros y reposteros y este trail es una de las maneras para conocerlos. Se trata de un recorrido autoguiado y, para participar, debes acercarte a la Oficina de Turismo de Stratford, donde adquieres un pase ($20 más impuestos) con el que degustas en 8 de las 16 tiendas participantes. Este pase es ofrecido durante todo el año pero tiene una duración de tres días desde el momento en que lo compras. ¿Sugerencias? Prueba las trufas de Chocolate’s Barrs Candies Inc, el “ Revel Mocha” de Revel Caffee ( con cocoa con sello Fair Trade y leche evaporada), el martini de de chocolate de Foster’s Inn ( hecho con vodka, crema de cacao y crema) o el set de chocolates Brix con un vaso Govino para servir vino que entregan en la tienda "Bradshaws".
Degustaciones de Té
Como buenos ingleses, en Stratford son apasionados por el té.En sus tiendas, los vendedores instruyen al turista sobre sus beneficios para la salud, les aconsejan cuáles elegir y hasta les enseñan a crear su propia mezcla según sus necesidades y preferencias.
Para aprender un poco más sobre este milenario brebaje, hicimos un alto en Tea Leaves (433 Erie Street), una tienda de té y bar de degustación dirigida por la sommelier de té Karen Hartwick, quien ha recorrido el mundo buscando los más deliciosos y únicos tés de calidad. Su pasión es, justamente, introducir a la gente a este sofisticado y rico mundo, para lo cual ofrece degustaciones guiadas de los mejores blancos, rojos, verdes, negro, tostados, laminados, entre otras variedades de tés, en un ambiente tranquilo y familiar ($27.50 más impuestos).
En sus catas, Hartwick nos teletransportó a lugares tan recónditos como China, Japón y Vietnam, nos enseñó acerca de las diferentes variedades y beneficios para la salud del té (así como los tiempos de infusión de cada uno) y, por supuesto, a degustarlos. Al igual que en una cata de vinos, se utilizan los tres sentidos: vista, olfato y gusto. Se parte mirando y oliendo la hoja seca de té, luego la hoja humedecida y lo mismo con el brebaje una vez servido- la idea es distinguir esencias y relacionar aromas - y se termina probándolo (se mueve en la boca y luego se bebe).
Almacenado en latas negras (no recomienda los recipientes de vidrio ya que dejan pasar la luz, acelerando así su deterioro), cada selección de té se empapa y se vierte en su propia taza de porcelana. Hartwick también ofrece degustaciones de tés con chocolates y con miel.
Gastronomía de primera
Cualquier época del año es un buen momento para viajar a Stratford y probar las fantásticas creaciones de sus chefs. La ciudad es famosa por sus festivales gastronómicos y los hay de todo tipo: de comida de carrito, de cocina patrimonial, de costillas y blues, del ajo, de comida picante, entre otros. El más importante se celebra en septiembre: se trata del “Savour Stratford Perth County Culinary Festival”, una verdadera fiesta gastronómica y musical donde, durante dos días, se degusta lo mejor de la cocina local. El evento incluye catas de vino y de cervezas artesanales, diferentes barbacoas en las calles, blues y música en vivo en los parques y seminarios y clases de cocina a cargo de renombrados chefs. Para muchos, “la mejor experiencia turística culinaria de Ontario”.
Los restaurantes de Stratford- elegantes y de ambiente íntimo- figuran entre los más reconocidos de Canadá. Sus chefs trabajan de la mano con productores locales para ofrecer creaciones frescas, originales y aromáticas, adecuadas a la temporada. Para una cena memorable, recomendamos Bijou (105 Erie Street), un elegante bistró de cocina francesa moderna con influencia asiática e italiana. En vez de una carta, encontrarás el menú escrito con tiza en pizarrones que cuelgan de las paredes, lo que le da un ambiente más relajado y familiar.
Para la cena, Bijou ofrece un menú de precio fijo de 2 y 3 platos ($48.00 y $55.00 respectivamente) donde te deleitarás, por ejemplo, con platos tan creativos y sabrosos como una sopa de raíz de apio con queso de oveja, puré de puerro, crutones y aceite de pimentón ahumado, o una perca amarilla salteada con champiñones shiitakes orgánicos, habas y vinagreta de pepino, que se deshace en el paladar. Tarte tatin de plátano con helado de piña colada, tarta de durazno con helado de pimienta negra y jarabe de albahaca o bien una selección de quesos artesanales con higo y mantequilla de manzana son algunos de los exóticos postres para elegir. Todo, por supuesto, acompañado de un buen vino (por copa o por botella) de su amplia carta, ya sea local o internacional. Platos originales más un excelente servicio hacen de este bistro toda una leyenda gourmet.
Cómo llegar
Stratford se encuentra a 130 kilómetros al suroeste de Toronto. Puedes llegar en auto, en tren o en un shuttle desde el aeropuerto. En verano, el Stratford Shakespeare Festival ofrece su propio servicio especial de autobuses desde Toronto y Kitchener durante los sábados y domingos.
Donde alojar
Recomendamos The Queen and Albert B&B (174 Queen Street), un acogedor inn en un inmueble de 1900 ubicado a solo minutos de las principales atracciones de Stratford. Cuenta con cuatro suites amplias, bien equipadas (con terraza, ideal para un cóctel veraniego) y con conexión a internet. Es el lugar perfecto para una estadía calmada y relajada, en una calle donde reina el silencio. Junto a su decoración ecléctica y ambiente acogedor, el inn destaca por sus abundantes desayunos preparados por su mismo dueño, William Broad, con surtido de cereales, jugos, croissants, mantequillas, mermeladas, té y café. El broche de oro son sus huevos estrellados con jamón y champiñones fritos con cebolla, acelgas, un poco de vino, sal y pimienta, acompanados de papas y pan dulce para untar (un manjar gastronómico). William también aconseja a sus huéspedes ordenar una maravillosa cena de muchos de los restaurantes en Stratford y disfrutar una cena más íntima en su comedor. www.queenandalbert.com
Más información: visitstratford.ca
Publicado: 15 de mayo, 2012.
Texto: Andrea Sagues
