Todos deberían poder encontrar un lugar para vivir, criar a sus familias y construir su futuro. Por eso, desde 2015, el Gobierno de Canadá ha ayudado a más de un millón de personas a tener un lugar seguro y asequible al cual llamar hogar. Esta labor es más importante que nunca, ya que las comunidades de todo el país siguen enfrentándose a los efectos de COVID-19. Al invertir en viviendas asequibles, podemos crear puestos de trabajo y hacer crecer nuestra clase media, construir comunidades sólidas e impulsar nuestra recuperación económica, así como ayudar a reducir el número de personas sin hogar y apoyar a los canadienses vulnerables.
El Primer Ministro, Justin Trudeau, anunció el lanzamiento de la nueva Iniciativa de Vivienda Rápida (RHI) que invierte 1.000 millones de dólares para crear hasta 3.000 nuevas viviendas permanentes y asequibles en todo el país.
El RHI desarrollará rápidamente nuevos alquileres modulares de unidades múltiples, convertirá edificios no residenciales en viviendas multi-residenciales asequibles y rehabilitará edificios abandonados o en mal estado en viviendas multi-residenciales asequibles. Los costos de adquisición de terrenos y edificios también serán elegibles en el marco de la nueva iniciativa.