Si quieres que las personas se involucren en una actividad, vuélvela interactiva. Este principio ha sabido utilizar el Metro Hall, que dentro de sus instalaciones colocó unas escaleras de piano totalmente funcional. Cada escalón representa una tecla del piano, que a su vez interpreta una nota musical, por lo que al utilizarla para subir o bajar, se pueden escuchar las escalas.
Es una buena iniciativa por parte de los auspiciadores del atractivo pues, junto a esta escalera, se puede leer un letrero que reza "La llave hacia el bienestar", en alusión a que el ejercicio físico -al usar las escaleras-, y el escuchar música son actividades de mucho beneficio para la salud general de las personas.
Las escaleras están ubicadas debajo de King Street en el vestíbulo que conecta Roy Thomson Hall y Metro Hall, donde también hay un Starbucks y un Rexall.