De los muchos puestos laborales que existen, hay un grupo de trabajadores cuyo única labor consiste en lograr el equilibrio entre el balance de la vida y el trabajo del staff de una empresa, así como asegurarse que la compañía cuente con una diversidad de personas en su planilla con el fin de no parecer racista, sexista u homofóbica. Nos referimos a los llamados ‘Directores de Felicidad’, que aunque suene extraño y quizá no haya escuchado sobre este puesto laboral, lo cierto es que está comenzando a hacerse popular en las corporaciones de Norteamérica.
Como su nombre lo indica, el Director de la Felicidad o CHO, por sus siglas en inglés (Chief Happiness Officer), es el responsable de la satisfacción de los empleados, como se suele decir ‘un trabajador feliz es un trabajador más productivo’. El Director de Felicidad se ocupa del diagnóstico del bienestar emocional de sus trabajadores, así como del ajuste de las políticas y cultura organizacional de la empresa a fin de crear un mejor clima laboral y las condiciones para alcanzar la felicidad en el centro de trabajo.
Se puede realizar encuestas para medir la satisfacción de los empleados, talleres, y actividades fuera del trabajo. Las compañías de la industria de las tecnologías son las primeras en recurrir a estos nuevos trabajadores, los Directores de la Felicidad pronto tendrán un posicionamiento en el mercado laboral.
FUENTE: NEW REPUBLIC
