Sin duda alguna cuando estamos comenzando un nuevo propósito (hábito) estamos expuestos a recaer en viejos patrones de comportamiento, vicios que nos llevan casi de manera inconsciente a los resultados que hoy queremos evitar.
Recuerdo cuando aprendí a andar en bicicleta, me costaba mucho trabajo mantener el equilibrio, sin embargo pronto me di cuenta que avanzando y concentrándome en el objetivo todos los miedos se iban y yo podía avanzar sin caer.
Por supuesto que esto no es tarea sencilla, si tu objetivo vale la pena seguro que tus retos costarán trabajo, de lo contrario cualquiera lo podría hacer y ya no sería tan valioso ¿No crees?
Lo importante es que ante cada caída, cada desvío del camino y cada retorno a viejos hábitos, mantengas en mente que el viaje hacia un nuevo destino rara vez se encuentra exento de errores, de hecho, en las sesiones de Coaching de vida que regularmente imparto a clientes de todo el mundo por medio de Internet, “error” es una palabra que te invito a modificar en tu vocabulario.
En tus propósitos de año nuevo no existe tal cosa como “error”, todo es aprendizaje, se trata de “INTENTAR Y CORREGIR” se trata de verificar las acciones que implementas y en caso de obtener resultados distintos a lo esperado simplemente hay que corregir, aprender y corregir para seguir hacia delante.
Así que ya lo sabes, este año nuevo, toma tus propósitos, enfócate en ellos y cada vez que sientas que has desviado el camino simplemente repítete a ti mismo: “INTENTAR Y CORREGIR, NO EXISTE EL ERROR, INTENTAR Y CORREGIR” mientras retomas el camino hacia tus objetivos.
Si deseas comentar sobre este o cualquier otro de mis artículos, no dudes en contactarme, tal vez tú requieres Coaching.
Publicado: 2 de enero, 2013
Texto: Jaime Leal
