El gobierno federal de Canadá ha anunciado hoy la inclusión de Chile en su lista de países cuyos ciudadanos pueden obtener asilo de manera más rápida al considerarlos territorios democráticos, donde existe el estado de Derecho, respetan los Derechos Humanos y normalmente no producen refugiados.
El principal requisito para entrar en esta lista es que los refugiados que solicitaron asilo en Canadá procedentes del país en cuestión se hayan reducido en al menos un 91% durante los últimos seis años, lo que ocurre con Chile y también con Corea del Sur, que se ha unido al mismo tiempo que el país chileno a esta lista denominada Designated Countries of Origin (DCOs), formada por 37 países.
El ministro canadiense de Inmigración, Jason Kenney, ha explicado que esta lista sirve para discriminar mejor los casos donde el solicitante de asilo necesita verdadera protección de aquellos en los que existe un abuso de este servicio para tratar de inmigrar a territorio canadiense.
Con el nuevo sistema de asilo para Canadá, todos los solicitantes procedentes de esta lista de países recibirán un estudio imparcial sobre las razones de su solicitud durante un periodo de entre 30 y 45 días en la entidad Immigration and Refugee Board of Canada (IRB), y en caso de no ser aceptados podrán recurrir a la Corte Federal.
A su vez, la resolución demorará 60 días para los ciudadanos de los países que no componen esta lista de DCOs, y en caso de que se les niegue el asilo, no tendrán posibilidad de recurrir a ninguna otra institución.
Según el gobierno canadiense, muchas democracias usan un sistema similar para acelerar los procesos de asilo de aquellos ciudadanos procedentes de países que en teoría no producen refugiados, como ya ocurre en Reino Unido, Irlanda, Francia, Alemania, los Países Bajos, Noruega, Suiza, Bélgica y Finlandia, entre otros.
El Alto Comisionado para Refugiados de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, ha reconocido que "hay países más seguros y otros en los que la presunción la solicitud como refugiados no será tan fuerte como en otros países" y ha valorado la legitimidad de favorecer el asilo a ciudadanos de países considerados como seguros.
