Nicolás Maduro, sucesor del fallecido Hugo Chávez, se proclamó anoche nuevo presidente de Venezuela en una ajustada victoria que obtuvo solo por un margen de 1,5% de los votos sobre su rival Henrique Capriles, quien no reconoce los resultados y pide un recuento de votos al denunciar hasta 3.200 irregularidades durante la jornada electoral.
Entre ellas se encuentra una rueda de prensa que Maduro ofreció desde el Palacio de Miraflores (Caracas) en mitad de los comicios que finalizaron con un 50,66% de los votos para el candidato chavista frente al 49,07% logrado por Capriles. Estos fueron los resultados que ofreció anoche el Consejo Nacional Electoral con el 99,12% de los sufragios escrutados.
La participación de los venezolanos en Canadá alcanzó el 85% con más de 4.300 votos registrados, de los que prácticamente todos fueron destinados al candidato opositor. El 96% de los votos de los venezolanos residentes en Canadá se dirigió a Henrique Capriles y solo el 4% votó por la permanencia del régimen bolivariano instaurado por Chávez.
No obstante, esta elección tiene un dato significado. La pérdida de Hugo Chávez le dejó a Maduro sin 600.000 votos menos que los que el fallecido líder obtuvo en las pasadas elecciones de octubre, donde salió reelegido al ganar de nuevo unos comicios donde ya existían dudas sobre su estado de salud. Entonces la diferencia fue mayor y Chávez venció con el 55% de los votos frente al 44% de Capriles.
“No luché contra un candidato sino contra el abuso del poder”, señaló Capriles al conocer los resultados que le daban de nuevo como perdedor. “Esta lucha no ha terminado. Le digo a Venezuela que esto es un mientras tanto hasta que se conozca la verdad”, afirmó.
Al mismo tiempo, Maduro consideró esta ajustada victoria como un nuevo triunfo de Chávez pese a estar muerto. “La burguesía creyó que había llegado el final de la historia de la Revolución de Bolívar del Siglo XXI”, pero Chávez sigue ganando batallas. La lucha continúa”, celebró el sucesor del movimiento chavista.
